Category: Reformas integrales

CARTAGENA

Un cambio radical se pedía en esta vivienda. Una buena base sobre la que trabajar. Teníamos metros y se pedía una distribución acorde a las nuevas necesidades de la familia. Para ello pudimos redistribuir las estancias pudiendo agrandar notablemente el espacio de la cocina y otro de los dormitorios se convirtió en vestidor para el dormitorio principal. Se rediseñaron baños y cocina y se guió al cliente en el proceso de selección de mobiliario y decoración de toda la vivienda. El resultado es el que veis. Un espacio super acogedor. Un buen refugio para la familia.

La transformación de la cocina fue uno de los objetivos prioritarios. Se deseaba un espacio de estar, independiente del salón, más desenfadado y de diario. Sin embargo se quería mantener cierta independencia acústica entre cocina y office de modo que se planteó una distribución en dos ambientes separados por una cristalera. El mobiliario de la cocina se ha realizado lacado en blanco con la encimera con tiradores acabados en bronce envejecido. Encimera Ivory Cream de Topzstone.

El baño común se redistribuyó ganando algo de espacio para el del pasillo de modo que pudimos hacer una amplia ducha.

El dormitorio principal se amplió con el vestidor y se reformó también el baño. Eliminando el bidé pudimos hacer un mueble de lavabo más acorde con las necesidades del cliente.

CARTAGENA

Cuando uno decide comprar obra nueva ha de saber que una vez la vivienda se escritura y se entrega al comprador queda aun camino por recorrer. Comienza en obra con la elección de acabados. En ocasiones el producto está muy terminado pero lo más habitual es que aún queden frentes abiertos que permitan al comprador personalizar su vivienda hasta conseguir el hogar en el que se desea vivir. Es el caso de este encargo.

La selección y compra del mobiliario, lámparas, cortinas, complementos… es una de las funciones que hemos realizado. Acompañando al cliente en cada fase.

Se trata de un apartamento donde recibidor, cocina y estar comparten un mismo espacio. Por ello se ha cuidado con esmero el diseño del mobiliario a medida tratando de buscar una imagen ligera, no invasiva. Muebles a medida con gran capacidad sin que pesen visualmente. Para ello se diseñó un armario lacado blanco integrado con el panelado del recibidor y un aparador en otro tono para marcar cierto contraste. Si tiradores para potenciar el efecto del panelado.

Aquí puede verse el panelado del recibidor integrado con el armario. La sensación es ligera y limpia.

Se diseñó una balda con soportes ocultos que hiciera la función de porta-objetos o vacía-bolsillos al llegar a casa. Todo lacado en blanco.

Para optimizar el espacio se eligió una mesa redonda con pié central.

Para la zona del televisor se diseño una balda mínima con soportes ocultos y un módulo que albergara los dispositivos de apoyo a la televisión evitando dejar a la vista todos los cables.

Y en esa integración cocina-estar cobra sentido una barra donde acompañar al cocinero o tomarse un café.

La cocina la diseñamos lacada en dos tonos metalizados con el uñero intgrado en las puertas bajas, gola oculta en puertas altas y push en las puertas superiores consiguiendo un efecto decorativo muy potente y dándole a la cocina el protagonismo que merece.

La iluminación integrada crea un efecto escénico muy agradable y práctico a la vez.

Se eligió para encimera el modelo Calacata Polished de Silestone que le da un punto de nobleza al conjunto. Para los zócalos inferiores se buscó una piedra gris que se mimetizara con el color de las puertas.

Para el dormitorio principal se buscó un cabecero tapizado fijado a la pared que no restara centímetros a la habitación, de tamaño ajustado. Por ese mismo motivo se buscaron mesillas de apoyo que no ocuparan lugar, una de ellas suspendida en la pared y la otra cilíndrica que se adaptara a la esquina irregular sin generar tensiones.

Por último en los baños se trabajó la iluminación, complementos, mobiliario de lavabo, mampara… consiguiendo dar forma y uso a este espacio definitivamente.

Ha sido un proceso largo y fructífero. Comenzamos el encargo en la fase de obra en que había que elegir los materiales de acabado que proponía la promotora. Suelo, azulejo, color de paredes… Una vez entregada la vivienda se trabajó en la instalación de iluminación y climatización y comenzaron los trabajos de carpintería y selección de mobiliario. Un trabajo paciente y con un resultado que nos encanta. Un placer.

Un ejercicio de búsqueda de luz de principio a fin. De aprovechamiento del espacio. De conseguir un ambiente amable. Un refugio… donde disfrutar de cada día.
Las premisas para este proyecto eran claras. Una familia con peques con ganas de compartir todos los espacios de la casa. Así es como aparece una cocina que es el corazón de todo. Lugar donde crear y acompañar.  Por lo demás se ha buscado una distribución muy práctica para sacarle jugo a cada metro cuadrado de esta vivienda.

 

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