¿Por qué diseñar un escritorio a medida con tantas opciones en el mercado?
No es solo una cuestión de estética. Todo parte de una necesidad concreta: que no tenga patas para facilitar la limpieza y el movimiento de la silla, que ofrezca almacenamiento, que no resulte visualmente pesado y que armonice con el resto del dormitorio.
Con esas premisas nos pusimos manos a la obra y diseñamos el escritorio que ves. Un mosaico de compartimentos pensados para almacenar distintos objetos y un cajón bajo la encimera que completa la capacidad de almacenaje.
Además, para evitar ocupar la superficie con un flexo, integramos iluminación LED directamente en el espacio de trabajo. Una solución funcional y limpia, que mejora la experiencia de uso sin interferir con el diseño.
La elección de materiales fue clave. Apostamos por panelado y palillería en tono nogal, combinados con una envolvente lacada en blanco que aligera el conjunto y lo conecta con el resto del mobiliario del dormitorio, también lacado en blanco.